De discursos, contradicciones y realidades…

Por Gladys Navarro

Hoy vi a una niña de no más de once años con un vientre redondo redondo como una pelota pequeña de básquet, vendiendo cositas, para ayudarse. Sobreviviendo.
Me partió el alma.
A esa niña y a tantas más le fallamos todos como sociedad. Le fallaron sus padres, sus maestros, su familia, sus vecinos, las instituciones, las autoridades, los medios, los periodistas, las asociaciones, todos.
¿Qué estamos haciendo?
Ah, pues presumiendo un estado líder en crecimiento económico, la tercera mejor gestión administrativa del país, miles de dólares de derrama económica…pero persiste una realidad. En tanto no logremos bajar los altos índices de embarazos adolescentes, de mujeres violentadas, de discriminación, de abusos a jornaleros, de una sociedad enferma de obesidad, diabetes, hipertensión, cardiopatías…, en tanto no se ofrezca una atención oportuna con suficiente personal médico especializado (condiciones que prevalecen desde el Seguro Popular); mientras no se logre avanzar en la planeación de los municipios, en la disponibilidad de agua, en una ciudad limpia… no encuentro la lógica del gobernador y sus funcionarios de presumir los éxitos de su gestión y aplaudir y replicar, y sorprende aún que como ciudadanos seamos tan condescendientes y hasta compartamos (yo no) que La Paz es el gran destino que destaca el New York Times. ¿Vivimos todos como turistas? ¿O nos creemos que pertenecemos a esa elite que departe frecuentemente en Palermos o festeja aniversarios en resorts, o viaja al extranjero en un fin de semana? Ah, pero como se toman la foto con los tacos y las empanadas o el chorizo y las tortillas de harina, ya se olvida todo, ya son pueblo y sirven, aplausos a ellos.
Sigamos así de permisivos. Sigamos encontrando en nuestro día a día a más niñitas embarazadas, conociendo de mujeres violentadas, de jóvenes hundidos en las adicciones porque aplaudimos los supuestos programas de prevención en las colonias que no son más que carpas con botargas, sin visión ni fondo ni estrategia ni resultados.
Sigamos distraídos en los líos partidistas, en la ambición por el siguiente escaño, en la entrega de obras a los compadres… aplaudamos los millones invertidos en elefantes blancos como los centros de convenciones, sigamos pensando que un crucero de turistas resuelve el problema de la conectividad de la zona norte, como si los muleginos se trasladaran en cruceros; caminemos por el malecón o por la playa, admiremos ese paisaje mientras tantos niños y niñas de tantas colonias aún no bajan a conocer el mar de La Paz, la ciudad donde viven.
Y guardemos silencio, tapemos la pluma, vendamos portadas con discursos, pan y circo, cerremos los ojos…
¿Así no nos partirá el alma nuestra realidad ?
¿Es la ruta ? No.
Duele 😔
Avancemos…

Foto: SubrayadoMx